Bastantes años después de la pacificación de la Frontera, lo que es hoy la novena región de la Araucania ciudad de Chile, debio soportar un nuevo tipo de bandidaje,mucho mas peligrosas que la que protagonizaron mapuches y militares, ya que en este caso se trataba de bandas armadas organizadas sólo para el pillaje y que luego de asaltar fundos y comercios, se perdían en la selva cordilleranas.
Fue entonces cuando brillo con luz propia el arrojo de Pedro Hernán Trizano Avezzana y sus rurales. Ellos fueron los que asumieron todo el peso de esta lucha para proteger a las familias campesinas y a los modestos comerciantes que de cuando en cuando veían impotente como un grupo de salteadores inrrumpian en sus tiendas, llevándose comestibles y todo lo que ahi encontraban.
Las primeras voces de alarma que recogieron el malestar de la ciudadania de entonces,
la dio el periódico "LA VOZ LIBRE".De él entrego el siguiente relato, publicado el 23 de Febrero de 1889.
"El Lunes 11 de Febrero de 1889 a las 9 horas el Teniente Trizano tuvo conocimiento que una partida de nueve salteadores armados todos de carabinas Winchester, montados en magníficos caballos y perfectamente amunicionados pues cada uno de ellos traia mas de cien tiros a bala obtenidos en Temuco e Imperial, o mas bien dicho proporcionados alli por gente decente, de la cual publicaremos mas tarde los nombres si persistenen su idea de amparar el bandalaje, se había puesto en camino dos días antes desde la provincia de Cautin a ésta con el objeto de testar, en combinación y unión de los bandidos de Guadaba, Purén, Vegas Blancas y otros puntos, algunos atrevidos golpes de manos sobre esta misma población, saltear enseguida a don Benito Alarcón en Guarehueico y a otros hacendados en departamento de Los Angeles.
Formaban parte del grupo de bandidos salidos del Cautin. José Angel Gallardo, José Ignacio Lagos. Daniel Sierra, N.Castro, Nicanor Moreno,Daniel Pulido,N.N. alias el zorro, alias el flaco,todos ellos bandidos de fama y el últimoel dia primero de este año dio muerte en las inmediaciones de Temuco a los soldados Grandón y Alvarez de aquella policia y aun indigena de la misma localidad.
Debian ellos reunirse en las cercanias de Corrientes habiendo establecido como hora de cita algunos momentos despues de la pasada del trendel sur con los Garces y Sandovalque debian llegar de las inmediaciones del Peligro, con los Navarretes, Morales y varios mas.
En cuanto notaron que los rurales se acercaban dieron los vigias la voz de alarma y todos de pies firme rompieron un nutrido fuego sobre los pocos oficiales. Estos sin contestar el fuego de sus adversarios, se precepitaron sobre la isla a la que penetraron por los dos únicos lados que existian. Alli comenzaron a su vez a hacer fuego también sobre los bandoleros quienes desconcertados por el temerario ataque de Trizano y sus rurales comenzaron a replejarse a toda prisa por tres caminos y en tres distintos grupos con dirección a las cercanías de Guadaba acosados por sus persiguedores quienes seguianlos con tenaz escarnizamiento.
Los bandoleros, a su turno, proteguidos por las sinusiodades del terreno, del cual era perfecto conocedores, mejor armados y montados que los que los perseguianse parapetaban en cada momentoa fin de repeler a sus contrarios quienes, con los caballos cansados por dos largos galopes de la mañana.
Mas de tres horas duró la persecución, hasta que los bandoleros huyendo en diferentes direcciones y alcanzando a la grupa de tres compañeros que habían caídos heridos, incendiaron el pasto a fin de salvarse de Trizano. Estos envueltos en el humo que ya los sofocaba, siguieron avanzando y persiguiendo a los malechores hasta que se perdieron de vista y desaparecieron en las numerosas quebradas."
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